Cuando queremos diseñar una nueva estancia de la casa lo primero que tenemos que pensar es en el colorido que queremos darle tanto a las paredes como a los muebles o los tejidos, y debemos tener en cuenta en primer lugar para que va a ser destinada dicha habitación. No es lo mismo decorar un dormitorio infantil, que una habitación de invitados o el dormitorio principal.
Si lo que estamos buscando es una decoración neutral, sin grandes contrastes de color ni tonos llamativos, hoy quiero daros algunas ideas para combinar distintos colores y crear un ambiente relajado.
Gris y blanco:
Es una de las combinaciones más neutras que existen. Podemos utilizar desde los blancos puros a los grises marengo combinados entre sí y con toda la variedad intermedia. Además este colorido presenta la ventaja de que si en un futuro nos cansamos del colorido y queremos dar un toque de color podemos añadir cualquier tono a la decoración que tengamos ya de base en grises, porque admite cualquier tonalidad por atrevida que sea. También podemos añadir ciertos toques pastel en rosas o celestes para romper con la frialdad del gris puro.
Admite perfectamente muebles tanto blancos como negros y puede incluso combinarse con tonalidades madera más o menos neutras como el pino.
Es una combinación perfecta para habitaciones de recién nacidos, dormitorios de adultos, salones y salas de estar e incluso para cocinas y baños.
Beige, blanco y marrón:
Otra combinación de colores muy neutra y que convierte el espacio en una zona tranquila son las tonalidades tierras combinadas con los beige y los blancos. Son colores que recuerdan a la naturaleza, las piedras y la madera y que producen tranquilidad allí donde se colocan.
Podemos utilizar una gama muy amplia de colores dentro de esta opción, desde los tostados o camel mas claros a los tierras oscuros que podemos combinar a la vez con pequeños toques de color en naranja y con muebles de madera, ya sea oscura o más clara.
Fuentes de imágenes: decoracionia, tatiana doria