Cómo crear un dormitorio infantil evolutivo

Los niños crecen a un ritmo parece que el tiempo va demasiado rápido. Cuando un bebé llega a nuestras vidas tenemos todo preparado en el dormitorio de los padres para poder atenderle durante la noche, pero al mismo tiempo estará su dormitorio completamente decorado y equipado. A medida que pasan los meses su dormitorio queda totalmente preparado y equipado para su primer año de vida. Pero, ¿qué pasa después?

El dormitorio infantil es un dormitorio que debe ser versátil, donde la estancia evolucione a medida que lo hacen los niños. De este modo te evitarás tener que estar gastando demasiado dinero en decoraciones nuevas, muebles nuevos y en tener que ir adaptándote a los gustos de tu hijo a medida que va creciendo.

Qué es lo que no debes hacer

Cuando se decora un dormitorio infantil lo último que debes hacer es decorar pensando en la edad que tiene tu hijo en ese momento. Por ejemplo, si piensas en decorar un dormitorio cuando tu hijo es un bebé, probablemente te decantarás por una cuna (que apenas te durará unos meses o dos años como mucho), en detalles infantiles e incluso en muebles de tamaño pequeño que se quedarán obsoletos rápidamente y que seguramente no puedan cumplir todas las necesarias.

Un ejemplo de muebles totalmente prescindibles es el mueble cambiador. Es cierto que cuando el bebé es pequeño funciona muy bien, pero sólo durante unos meses y no siempre se utiliza para cambiar al pequeño. Muchas veces te sorprenderás utilizando la cama, el sofá o cualquier otra superficie. Por lo que este mueble cuando menos te lo esperes acabará siendo un trasto que regalarás.

Para que no te encuentres en momentos en los que te des cuenta que estás malgastando tu dinero, tu tiempo y tu energía, lo mejor que puedes hacer es crear un dormitorio infantil evolutivo desde que tu hijo llega a este mundo. Sólo de esta manera podrás evitar gastar demasiado dinero, los cambios serán mínimos y fáciles de realizar y lo mejor de todo, es que el dormitorio crecerá junto con tu hijo o hija. ¿Quieres saber más?

Los colores importan

Si decoras el dormitorio con colores demasiado infantiles es probable que cuando crezca tengas que ir cambiando la pintura. Que si bien es cierto que la pintura se debe retocar de vez en cuando, resulta bastante molesto tener que cambiar las combinaciones por completo ya que los muebles y los textiles suelen o deberían cambiar poco.

Por ejemplo, si escoges los colores en tonalidades pastel para que la habitación de tu bebé sea lo más dulce posible, te darás cuenta que en cuanto pasen 5 años necesitarás colores más vivos y vibrantes.

Entonces, ¿cuál puede ser la mejor opción en estos casos? Deberás escoger colores que sean fácilmente combinables con los textiles o los accesorios de acento del dormitorio, que son más fáciles de cambiar y que pueden combinar perfectamente. Por ejemplo, deberás tener las paredes con colores neutros y jugar con los colores del resto de la habitación. ¡Así podrás cambiar los colores sin necesidad de tener que pintar las paredes de otro color a cada cierto tiempo!

Muebles evolutivos

Es necesario que desde antes de que tu hijo nazca tengas en mente la necesidad de tener muebles evolutivos en su dormitorio. Sólo de esta manera podrás utilizar los muebles por más tiempo y podrás ahorrarte un gran dinero. Los muebles evolutivos son muebles que acompañarán a tu hijo a medida que vaya creciendo sin necesidad de cambiarlos por otros que se acoplen a sus necesidades. A continuación podrás ver algunos ejemplos.

La cómoda sin cambiador

La cómoda no es necesario que sea cambiador. Una cómoda es práctica y funcional durante todo el tiempo porque sus cajones son una gran ayuda para almacenar pero no es necesario que sea cambiador. El cambiador es totalmente prescindible y si no te gastas dinero extra en esto, mejor.

La cuna, mejor que sea cuna – cama

La cuna para que realmente sea evolutiva puedes optar por comprar una cuna – cama. Un bebé no dormirá en una cama desde el momento que nace puesto que es demasiado grande e incluso peligroso porque no tiene barrotes ni chichoneras para protegerle. Pero actualmente venden unas cuna – cama que son ideales para los bebés y que pueden dormir en ellas hasta que tienen 7 años si es necesario. Estas camas suelen tener unos barrotes que se pueden quitar para que los niños cuando sean más mayores tengan su pequeña cama. E incluso hay algunos modelos que se convierten en sofás para que cuando los niños ya sean más mayores y necesiten otro tipo de cama no sea necesario tener que desechar este mueble y siga teniendo una presencia y una funcionalidad dentro del dormitorio.

Los armarios

Hay muchos padres que tienen la tentación de comprar muebles en tamaños diminutos porque sus hijos son pequeños y así pueden tener más acceso a los armarios y muebles. Aunque creas que esto ayudará a su autonomía no tiene por qué ser así siempre. Es decir, tú puedes ayudarle con su autonomía con muebles que le duren todo el tiempo.

Por ejemplo, en lugar de comprar muebles que sean de pequeño tamaño, es mejor comprar muebles, armarios o mesitas que se puedan adaptar a su crecimiento. Sólo tendrás que usar de forma más frecuente los cajones a los que tu hijo llega o las zonas de almacenamiento más accesibles para él. De este modo, tu pequeño podrá trabajar su autonomía perfectamente y tú tendrás unos muebles que le durarán por lo menos, hasta la adolescencia o más.

Invertir en calidad es una buena opción

Además de añadir personalidad al dormitorio de tu hijo o hija y que tengas en cuenta sus gustos a medida que crece en los textiles y accesorios, también deberás tener en cuenta la calidad.

Los muebles y textiles de calidad te asegurarán de que estos elementos te duren por más tiempo. En cambio, si prefieres no invertir dinero en calidad es probable que a la larga te arrepientas porque se rompa más fácilmente o porque el desgaste del uso diario haga que se deteriore y afee la estancia.

¿Qué más crees que se debería tener en cuenta para poder crear un dormitorio evolutivo?