Decoración: paredes de piedra

Algunos dicen que las paredes de piedra puede enfriar un ambiente y su entorno y que puede ser perjudicial para el lugar que se intenta decorar del hogar. A pesar de la percepción de su temperatura emocional, una pared de piedra tiene algo que las demás paredes no tienen, una decoración de alta potencia.

Los elementos naturales son capaces de cambiar la apariencia de un entorno que ofrece a la vista y las sensaciones táctiles que los materiales artificiales no son capaces de despertar. Y la piedra no se queda atrás, ofreciendo una gran opción para la decoración del hogar.

Fuerte, potente, la piedra nos brinda recuerdos de un pasado ancestral y pone en al mismo tiempo, una elegancia sobria y moderna a la decoración del hogar. Y especialmente, es suficiente en sí misma. Una pared de piedra, de hecho, se convierte en muy poco tiempo en protagonista de un entorno y en la etapa mismo tiempo ideal para otras adiciones.

Una pared de piedra en el interior de una casa puede estar sola o también puede ser enriquecida con otros elementos de decoración, como accesorios y formas en un intercambio mutuo de atención. Un estante en un muro de piedra, de hecho, mejora la apariencia, pero al mismo tiempo se ve reforzada por el hecho de estar colocado en la pared en particular, y lo mismo ocurre con cualquier cosa que se coloque sobre el estante.

Pero quizás por encima de todo, la principal ventaja de un muro de piedra es que va con todo y si no lo ha adivinado los colores se complementan el otro, a lo mejor allí durante años y años, improvistamente parecer fuera de lugar al lado de su nueva pared. Para ello debemos tener en cuenta la combinación con otros minerales como el mármol u otras piedras y decoraciones.

He aquí en nuestra galería de imágenes un resumen de ejemplos que pueden ser una inspiración.