Las toallas son imprescindibles en el baño y sin embargo no tiempo resulta fácil encontrar un sitio para organizarlas. Podemos hacerlo de muchas maneras; pero no todas tiene por que ajustarse a las necesidades de nuestro baño. Dependerá tanto del tamaño, como del diseño y la funcionalidad del mismo.
Disponer de un armario en el que organizar las toallas es la opción mas clásica y probablemente la mas práctica. ¿Y si no disponemos de espacio suficiente? ¿y si preferimos contemplar otras opciones mas económicas? Entonces no tendremos mas remedio que pasar a un plan «B» lleno de posibilidades
Hoy en día los cuartos de baño se hacen pequeños, de ahí que cada vez haya mas empresas que ponen toda su atención en lanzar soluciones prácticas que maximicen el espacio de los mismos. Existen en el mercado muebles de lavabo con una gran capacidad de almacenaje ¡una estupenda solución!
Cuando tenemos la posibilidad de diseñar nuestro propio baño podemos apostar por construir estanterías de obra. Nos resultarán mucho mas económica esta opción que comprar o encargar un mueble a medida posteriormente. En baños pequeños es especialmente útil; unos «nichos» pueden servirnos para separar espacios y al mismo tiempo organizar nuestras toallas.
En los cuartos de baño individuales, cuando el volumen de toallas es menos, podemos plantearnos el organizarlas todas en un calentador de toallas o escalera. El primero además de proporcionarnos un espacio para almacenar las toallas, nos permite secarlas y/o mantenerlas calientes. Las escaleras son una propuesta mas rústica y económica; sin embargo hay que tener en cuenta que ocupan mas espacio y que pueden estorbar si el cuarto de baño no es amplio.
Existen numerosas opciones para almacenar las toallas, pero éstas nos ha parecido las mas interesantes, bien por su practicidad bien por su popularidad. ¿Y tu? ¿por cual te decantas?