A veces se puede sentir como si nuestras casas hibernaran tanto como los osos durante el clima más frío. Durante el invierno, nos acurrucamos con pesadas mantas y cálidas estufas. Sin embargo, a medida que cambian las estaciones, lo que parecía acogedor en un clima frío puede parecer repentinamente oscuro y opresivo. Si bien es probable que no necesites un cambio total de hogar, prepararte para el verano puede ayudar a que tu espacio se sienta más liviano y brillante.
A continuación vamos a darte algunos consejos para que puedas tener una decoración este verano de lo más actualizada y que además, te sientas en casa como si estuvieras en el mejor hotel de la costa tropical.
Cambia las cortinas
Tus cortinas probablemente tienen doble función durante los meses de invierno. Te dan privacidad y te ayudan a evitar más frío de la cuenta. Pero el clima más cálido requiere tratamientos de ventanas más ligeros, así que quita esas pesadas cortinas y reemplázalas con algo que diga verano. Al optar por una tela de gasa, las cortinas transparentes te brindan privacidad y aún permiten la circulación de la luz y el aire. O intenta una sombra de bambú para añadir un elemento natural mientras aún puedes bloquear el sol brillante de la tarde.
Piensa en accesorios naturales
Los accesorios listos para el verano pueden cambiar la sensación general de tu hogar, y ¿qué dice el verano más que los materiales naturales? Traer elementos naturales ayuda a elevar el tono de tu espacio, haciendo que se sienta brillante y aireado.
Trata de traer algunas canastas tejidas para guardar chanclas o ropa exterior para niños. Lleva elementos de madera natural como candeleros o tazones frescos para alegrar la mesa de tu comedor. O complementa con cojines impresos con palmeras o con cobertores de colores claros.
Hacer una mini limpieza
El desorden puede hacer que un hogar se sienta más cargante de lo que realmente es. El solo hecho de limpiar las superficies horizontales de tu hogar puede hacer que se sienta aireado y listo para el verano en solo unos minutos. Quita las cosas que tengas por el medio. Después de un largo invierno, es posible que tengas velas, decoraciones navideñas, papeles y otras cosas que simplemente abarroten tu casa.
Aquí hay algunas otras tareas rápidas de cinco minutos para limpiar tu casa y hacerla más liviana:
- Abre las ventanas. Asegúrate de que los cristales están limpios.
- Guarda las telas que sean más pesadas y saca solo las que sean más frescas.
- Limpia el polvo de todo tu hogar.
- Cambie las sábanas de las camas por sábanas limpias y más livianas.
- Guarda las cosas que sean de temporada y que nada tengan que ver con el verano.
- Ten un aire acondicionado listo para funcionar cuando suban las temperaturas demasiado.
Añade verde a la decoración
Las plantas no solo ofrecen una perspectiva fresca de la decoración. En realidad, hacen que el aire de tu hogar esté más limpio. La elección de plantas fáciles de mantener hace que añadir verde sea una obviedad total que refresque tu espacio. Acude a tu vivero local y solicita específicamente plantas que se crezcan bien en interiores. Las plantas como el lirio de la paz, la planta de la serpiente y las suculentas requieren un riego semanal, pero te devuelven la vida nueva en tu hogar.
Cambia la iluminación
Cuando piensas en el clima frío, probablemente pienses en una luz tenue: el resplandor del fuego o una vela o la lectura de un buen libro junto a la luz ámbar de una lámpara. Sin embargo, el verano significa una luz más brillante y dejar que entre el sol, por lo que es un buen momento para cambiar la iluminación de tu hogar. Coloca bombillas blancas brillantes en tus accesorios, abandona las velas y trae tanta luz natural como puedas. Limpie tus ventanas y asegúrate de eliminar todo lo que pueda estar bloqueando la luz, como piezas de muebles grandes. ¿No tienes mucha luz natural? Aporta a tu hogar algunos espejos para reflejar la luz y actuar como ventanas interiores.
Mueve los muebles
La forma en que usas tu casa en el invierno en comparación con el verano es probablemente diferente. Los inviernos significan más noches en las que se ve más la televisión o que haya personas en tu hogar para tomar café… por lo que el mobiliario refleja eso. En verano, en cambio, se pasa más tiempo afuera y menos tiempo viendo la televisión.
Mover los muebles en tu hogar, ayuda a que tu hogar esté listo para el verano. Piensa en cómo vive tu familia durante el verano, cómo se pasa más tiempo y cómo tendrías que mover tus muebles en consecuencia.
Aromas de verano
Una de las mejores maneras de refrescar tu hogar para el verano es simplemente traer aromas estivales. Tanto si te gusta la comodidad de una vela como si prefieres los aceites perfumados, los aromas de verano pueden alegrar tu estado de ánimo, sin importar el clima. Busca aromas limpios como el limón y la naranja es un acierto. O, si eres más una persona floral, elige fragancias como la lila o la rosa. ¿Prefieres algo limpio? El aroma de lino son perfectas para darle a tu hogar esa sensación de limpieza.