Cuando queremos colocar alfombras en la decoración, solemos plantearnos cuestiones básicas como el emplazamiento, el tamaño adecuado y la funcionalidad que queremos darle: Dividir ambientes, captar la atención de un espacio, agrandar una estancia, aportar calidez, etc. Pero hay otras pautas añadidas más relacionadas con el diseño o con nuevas formas de uso; incluyo aquí algunos ejemplos establecidos:
Acostumbrados de nuevo a verlas colgadas en la pared como se hacía en siglos pasados, actualmente es posible encargar alfombras para el dormitorio y revestir el cabecero de la cama en el mismo tejido, o reproducir el mismo diseño en todo el salón: La serie Kilt de Asplund propone un aparador de 120 x 120 cm. cuyo motivo de rayas cruzadas en relieve se repite sobre el suelo en una alfombra del mismo tamaño; este truco decorativo crea un divertido juego visual, dando homogeneidad a la estancia.
Otras veces la alfombra puede ser una pieza fundamental en una zona de paso, no sólo por una cuestión estética: Alarga un pasillo demasiado corto, otorga más luz eligiendo un color potente, o a nivel de contract ayuda a dirigir el paso en una u otra dirección. En estos casos es mejor decantarse por modelos de tamaño reducido que no se coman el espacio, como la alfombra Vermino diseñada en fieltro por Alfredo Häberli; revitaliza el clásico formato rectangular con un entramado de formas orgánicas, tiene poco grosor para evitar tropiezos y un tratamiento anti-manchas que facilita el uso continuo.
Ahora también es posible contar con alfombras en diseño moderno y resistentes al agua; una de las primeras diseñadoras en desarrollar este aspecto ha sido la finlandesa Hanna Corvela, cuyo modelo Aqua realizado en fibras sintéticas y siete opciones de color se puede utilizar en baños, terrazas, saunas, piscinas, etc. Es agradable al tacto, fácil de limpiar, tiene una base antideslizante, se puede mojar para obtener frescor y se fabrica a medida en un tamaño máximo de 165 cm.
Más información – Alfombras en la decoración
Fuentes – Asplund, Alfredo Häberli, Xetai