El joven arquitecto William O’Brien ha diseñado la Casa Allandale, situada en West Mountain (Estados Unidos), un proyecto basado en una vivienda con un espectacular tejado a dos aguas que se extiende hasta el suelo convirtiéndose también en fachada.
La planta es totalmente asimétrica, con tres volúmenes diferenciados, uno central dividido en dos plantas y dedicado a los baños y las habitaciones, otro en el que se sitúa la biblioteca, la bodega y un sótano para el garaje, y finalmente otro para la cocina, el comedor y un salón con su fachada acristalada.
El proyecto es realmente excepcional por su afán para superar las aparentes limitaciones de su sección triangular y conseguir interesantes configuraciones en su interior superando los ángulos con absoluta elegancia.
Un interior sencillo y limpio, con sus dos sillas frente al ventanal, nos transmite una imagen bucólica.