No importa cuál es el tamaño de tu hogar, es posible que siempre necesites más espacio para almacenar tus cosas. Parece que las personas nos adaptamos al espacio que tenemos y que cuanto más tenemos, más cosas queremos guardar por lo que siempre, es importante tener estrategias de almacenamiento que nos ayuden a tenerlo todo ordenado. Las cajas de plástico pueden ser un gran aliado para ti.
Aunque es cierto que también resulta importante saber priorizar las cosas que se quieren guardar, de las necesarias e imprescindibles, de aquellas que son totalmente prescindibles y que no es necesario que mantengas en tu casa, es decir, que puedes dar, regalar o vender. Pero para aquellas cosas que sí quieras mantener en tu hogar, las cajas de plástico pueden serte de gran ayuda.
Prioriza lo que quieres o necesitas en tu hogar
Lo primero antes de empezar a pensar en todas las cajas de plástico que quieres tener para poder guardar tus cosas, es qué tienes que hacer con todo lo que deseas almacenar. Hay una regla simple que puedes utilizar en tu vida diaria: si hay algo que no has utilizado en más de dos años, ha llegado el momento de deshacerte de ello. Puedes regalarlo a alguien que sí lo necesite o venderlo a un precio económico, sobre todo si está en buen estado y otra persona puede aceptar el pagar por este artículo que ya no te sirve.
De esta manera solo necesitarás unas cajas de plástico concretas para tener guardado todo aquello que realmente necesites, sin más, ni menos. En cambio, si guardas más de lo que necesitas podrías acumular demasiadas cajas de plástico y esto, podría ser también un problema para ti. Si tienes demasiadas cajas de plástico, tendrás que guardar demasiadas y también necesitarás grandes espacios para ello. Además, podrías potenciar el caos y el desorden al tener demasiados objetos dentro de ellas.
No merece la pena tener cajas y cajas con objetos dentro de ellas si no los vas a utilizar nunca. Es una pérdida de dinero, de tu tiempo y además, estarás desaprovechando espacio que posiblemente podrías utilizar para otros fines y que te resultaría más práctico.
Guárdalas en un lugar accesible
Para que las cajas de plástico en tu hogar realmente te sirvan para almacenar, deberás guardarlas en un lugar accesible para que puedas tenerlas a mano siempre que las necesites. Por ejemplo, si son artículos que necesitas tener en tu dormitorio, puedes guardar las cajas de plástico encima del armario o debajo de la cama. Si son artículos necesarios en la cocina, escoge cajas con tamaños adecuados para guardarlas en este espacio, por ejemplo en un armario que tengas en tu cocina. Si son cosas que quizá, no utilices muy a menudo pero que son necesarias que guardes porque puedes utilizar en cualquier momento como mantas, aparatos eléctricos u otros objetos, puedes guardarlos en una estancia que tengas como almacén o trastero.
Lo que importa es que cuando guardes tus cajas de plástico, puedas saber dónde están en el momento preciso en las que las necesites. Así podrás acceder a ellas siempre que sea necesario.
Pon nombre a todas las cajas
Si no quieres tener demasiado lío cuando quieras recuperar algún objeto y no te encuentres abriendo todas las cajas de plástico que tienes guardadas en tu hogar, entonces, lo más práctico es guardar las cosas por orden y etiquetar las cajas para saber qué hay dentro.
De esta manera, aunque las cajas de plástico sean transparentes y se vea lo que hay en el interior, podrás saber con mayor certeza qué es lo que hay en el interior de cada una de ellas. Por lo tanto, cuando necesites cualquier elemento de tus cajas de plástico podrás saber exactamente en qué caja está y así poder abrir únicamente esa y volver a guardar todo bien ordenado sin gastar demasiado energía y tiempo en la búsqueda del objeto necesario.
La capacidad de las cajas de plástico
Cuando vayas a comprar cajas de plástico te darás cuenta que hay muchas clases, tipos y diseños. Pero lo que realmente importa además de esto, es que sean prácticas para ti. En este sentido, es importante que midas el tamaño de las cajas de plástico antes de comprarlas y que te asegures que irán bien en tu hogar y que cumplirán el fin que quieres.
Hay cajas de plástico con diferentes capacidades (en litros). Busca aquellas que te vayan bien, que encajen con el espacio que tienes disponible y también, con los objetos que quieres meter en su interior. Una vez que tengas todo esto claro, entonces podrás comprar aquellas que mejor te vengan y darles el uso de almacenamiento para el que están destinado. Con todo esto en cuenta, podrás tener un hogar mucho más ordenado, sin elementos que no te sirvan de nada.