El otro día hablamos de las distintas opciones y sistemas de colgado que tenemos a nuestro alcance para decorar nuestras paredes. Una vez hayamos decidido con que modelo y que tipo de colgador elegimos para nuestra casa tenemos que pasar a la acción y comenzar a colgar nuestros cuadros. Para ello quisiera daros unas pequeñas pautas a tener en cuenta.
En primer lugar debemos tener claro cuales van a ser los elementos o cuadros que vamos a colgar y cual va a ser el lugar de cada uno, si van a ir situados en línea, por parejas, en grupos o si va a haber un elemento central y alrededor de este el resto de menor tamaño. Una vez lo tengamos claro debemos situarlos en la pared haciendo pequeñas marcas en ella para que nos ayuden en el siguiente paso. Utilizaremos para ello un lapicero dibujando de forma muy débil para poder borrarlo después y que no quede marca alguna, y no hace falta dibujar todo el contorno del cuadro valdría con sus 4 esquinas o solamente con las dos superiores.
Deben estar en línea con el techo y las paredes, evitando que queden torcidos o caídos de uno de sus lados.
Después mediremos donde van los enganches de la parte posterior del cuadro y las dibujaremos en la pared en sus sitio con respecto a las medidas que hicimos anteriormente. En estas últimas marcas que hemos realizado colocaremos nuestros colgadores, ya sean escarpias con sus tacos correspondientes, los cuelga-fácil u otro método de colgar que vayamos a utilizar. Una vez colocados y clavados podremos borrar todas las marcas de la pared y colgar nuestros cuadros en su sitio.
Si vamos a utilizar barras o hilos colgados de railes, no es necesario marcar la pared, pero si deberemos marcas en las barras a la altura que queremos que vaya situado cada elemento para situar el enganche.
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imágenes: bricolin, mitula, mujer.orange