Me gusta como se ha gestionado este pequeño espacio de 27m2. Encontramos en él todo lo que una casa necesita: un dormitorio, una zona de trabajo, un rincón de lectura, una cocina completa y un cuarto de baño. Quien crea que no es posible vivir en 30m2 aqui tiene la prueba de que se equivoca.
Los techos altos, la buena gestión del espacio y la acertada elección de colores, contribuyen a ampliar visualmente la habitación. La madera, los textiles y las plantas aportan, por su parte, calidez al espacio. Se logra así un espacio pequeño pero muy acogedor con todo lo necesario para un single.
Cuando uno entra por la puerta de este pequeño estudio se encuentra con una habitación amplia y luminosa en la que comparten espacio la zona de dormitorio con la zona de trabajo, la zona de relax y la cocina. A primera vista no parece faltar nada imprescindible para hacer de este pequeño estudio un verdadero hogar, ¿verdad?
Los suelos de parquet, las paredes blancas, los amplios ventanales y los altos techos contribuyen a crear una «falsa» sensación de amplitud. Y decimos falsa porque los metros, aunque bien distribuidos, son los que son. Junto a la puerta encontramos un perchero muy práctico para almacenar no solo prendas, también accesorios e incluso libros. Y un banco ligero, que puede servirnos a diario para calzarnos, pero también para acomodar a los invitados trasladándolo a la zona de relax.
La zona de estar se ha creado a partir de un sofá esquinero de la colección Ikea PS. Una elección que ha permitido ahorrar espacio e incorporar unas mesas auxiliares en las que disfrutar de un café y un buen libro. A un lado de esta sala de estar encontramos la cocina, pequeña pero funcional. Dispone de una pequeña zona de trabajo y otra de almacenamiento que sirve al mismo tiempo de barra de desayuno. Y no falta ningún elemento imprescindible para que no resulte práctica: nevera, vitrocerámica y fregadero .
El dormitorio se ubica junto al ventanal. Dispone de un amplio armario, un espejo de pie y una escalera de madera que sirve para colgar diferentes prendas. Resulta cálido gracias a los textiles, que combinan blancos y tonos tostados, y a las plantas verdes que aportan color.