La iluminación es un punto clave en la decoración, ya que equivocarnos con ella puede estropear una buena idea decorativa. Sin embargo, a la hora de iluminarlo todo también debemos tener en cuenta las lámparas que deseamos poner, porque deben ir acorde con el espacio que tengamos y con el estilo en el que hayamos decorado la estancia.
Elegir las lámparas para el salón pasa por saber exactamente el tipo de iluminación que vamos a darle. A partir de ahí podemos utilizar lámparas de todo tipo, desde las más modernas a otras vintage, en materiales que van desde el papel a la tela, el metal o el cristal.
Lo primero que hay que tener en cuenta es que el salón es un sitio en el que pasamos mucho tiempo, pero que no suele requerir una luz especial. Como se trata de un lugar de relajación y reunión, hay que pensar en una iluminación que resulte suave aunque suficiente. Además, es importante poder tener varios puntos de luz, para que esta no se encuentre concentrada en un solo punto. Si tenemos un rincón de lectura, lo mejor es poner una lámpara de pie específica para este espacio.
El estilo también nos va a interesar a la hora de buscar las lámparas perfectas. Si tenemos un salón vintage podemos decantarnos por una lámpara de araña en versión más actual. En el caso del estilo industrial tenemos las lámparas de metal tipo focos, y en los salones modernos podemos utilizar los halógenos o alguna lámpara de estilo moderno.
Si deseamos crear una iluminación diferente en ocasiones, podemos tener luces puntuales, con pequeñas lámparas distribuidas por el salón. Estas serán las lámparas pequeñas o las de pie, que dan una iluminación más intensa en espacios más pequeños. Y en la actualidad hay todo tipo de diseños para incluir en las mesas auxiliares del salón.