Todos tenemos algo de plata en casa. Ya sea una joya, un marco de fotos, o incluso cubertería, es un material que se utiliza mucho, pero que también tiene el problema de que se oscurece fácilmente. Es por eso que a veces hay que sacar un hueco para limpiar la plata, un trabajo algo aburrido pero que volverá a sacar el brillo y el esplendor a todas esas piezas de plata que tenemos en casa.
No hay una sola forma de limpiar la plata. Esto es algo que debemos saber, porque hay diferentes trucos que pueden servirnos para ello. Vamos a daros algunas ideas para que limpiéis la plata que tenéis en casa. Un trabajo que se puede hacer en un día con los materiales adecuados.
Consejos y material
La plata no se estropea ni se oxida por cambiar de color. Ese tono más oscuro es una reacción con el sulfuro de hidrógeno, lo que la oscurece, pero hay varias formas de utilizar ingredientes para devolverle su tono original. Una de las cosas que debemos utilizar son los guantes, ya que sino podremos acabar con las manos oscuras. Además, si vamos a utilizar un paño o un cepillo, debemos saber que van a quedar muy sucios, que luego tendremos que limpiarlos mucho para recuperar su tono. A veces es mejor recurrir al papel para luego tirarlo que no manchar un paño.
Un buen consejo que debemos tener en cuenta es el de hacer la limpieza en un lugar aireado. Abre las ventanas para no respirar los vapores de algunos ingredientes como el bicarbonato que pueden ser perjudiciales. Como en cualquier limpieza en la que usemos productos químicos, hay que tener el espacio aireado siempre.
Agua con sal
Este es un remedio muy sencillo pero para cosas que son pequeñas. Por ejemplo una cadena o unos pendientes de plata que tengamos y se hayan oscurecido con el tiempo. Tienes que hervir el agua y ponerla en un recipiente. Hay que eharle la sal y remover para que se disuelva en el agua y se mezcle. A continuación, pon dentro la plata. Debes dejar reposar toda la noche o durante horas. Después retiras y simplemente limpias con un paño. Si son cosas pequeñas, se recomienda utilizar un cepillo de dientes o bastoncillos de algodón para lugares que son difíciles.
Bicarbonato de sodio
Con el bicarbonato de sodio hay varios remedios a la hora de limpiar la plata. Hay quien dice que hay que poner agua a hervir, y añadir bicarbonato de sodio. El siguiente paso es añadir la plata directamente en esa mezcla, y remover con una cuchara que sea de madera para que no le afecte el bicarbonato. Después simplemente tendremos que frotar con un paño.
Otra forma de utilizar el bicarbonato es mezclarlo con limón o con vinagre. Esta mezcla se diluye y se utiliza para ir limpiando con un paño la plata. En ambos casos, los vapores del bicarbonato pueden ser perjudiciales, por eso tenemos que hacer esto en un lugar ventilado. Además, el vinagre hay que añadirlo poco a poco, porque produce efervescencia y vapores.
Pasta de dientes
Al parecer la pasta de dientes también limpia la plata. Con un cepillo o un paño podemos ir limpiando la plata con este sencillo ingrediente que todos tenemos en casa. Esto es mejor para objetos pequeños, ya que con los grandes se gasta mucha pasta de dientes. Además, hay que limpiar los objetos con agua y jabón neutro antes, y después añadir la pasta de dientes e ir frotando. Esta es una buena solución para esos objetos de plata que son labrados y tienen muchas zonas pequeñas.
Papel de aluminio
Otro truco está en forrar un recipiente con papel de aluminio y añadir agua caliente y una cucharada de sal. Este es uno de los trucos más utilizados, porque además es fácil. Tenemos que dejar los objetos en el agua unos diez minutos y luego sacarlos y frotarlos con un paño para que queden brillantes de nuevo. Además, todos tenemos estos materiales en casa, y es un truco que se hace rápido.
Limón con sal
El limón es un ingrediente que se utiliza en muchos trucos para limpiar la casa, ya que ayuda a quitar la grasa y a limpiar superficies, y también es bueno para limpiar la plata. En este caso el limón se corta a la mitad y se le añade sal. Esto se frota contra la plata y se deja actuar un tiempo, para enjuagar y limpiar con un paño a continuación. Esta es buena idea para los objetos más grandes y lisos.
Detergente
Otra forma rápida de acabar con el color negro en la plata es la de utilizar el detergente típico de la ropa o las pastillas de antiácido, aunque en este caso también hay que tener mucho cuidado de utilizar guantes para no dañar las manos. Se disuelve cualquiera de las dos sustancias en agua caliente y se deja la plata sumergida unos minutos para a continuación limpiar con un paño suave.