¿Estás cansado de que cuando limpias un espejo siempre se quedan manchas y no sabes cómo limpiarlo para que quede correctamente? Aunque puede que no te parezcan fáciles de limpiar, si sabes hacer los pasos correctos, es más sencillo de lo que te imaginas. Tienes que tomarte un minuto para mirar alrededor de tu casa.
Es posible que te sorprendas al ver todos los espejos que tienes: en el baño, en el tocador, en la pared, en vitrinas, de mano… Un espejo es funcional para ayudarnos durante el aseo y el vestirnos, pero también es decorativo para ayudar a agregar profundidad y reflejar la luz alrededor de una habitación.
Sin embargo, un espejo sucio o lleno de rayas después de limpiarlo no es atractivo. Afortunadamente, puedes tener espejos brillantes y marcos decorativos limpios con solo unas pocas herramientas y productos que probablemente tengas a mano.
Con qué frecuencia limpiar los espejos
Los espejos de baño a menudo necesitan atención diaria para mantenerlos limpios del agua, la pasta de dientes y las salpicaduras de productos de belleza. Los espejos decorativos deben limpiarse semanalmente con un plumero sin pelusa y limpiarse a fondo al menos una vez al mes para eliminar los contaminantes que se asientan en la superficie. Los espejos de los vehículos deben limpiarse al menos cada dos meses para una mayor visibilidad.
Cómo limpiar un espejo
No pierdas detalle de los siguientes pasos para que tu espejo quede impecable:
- Crea una solución de limpieza. En una botella con atomizador, mezcla partes iguales de agua fría y vinagre blanco destilado. Tienes que asegurarte de añadir una etiqueta a la botella.
- Limpia residuos resistentes. Antes de hacer una limpieza general del espejo, debes eliminar los residuos secos como la pasta de dientes y las salpicaduras de los productos de belleza. Humedece una bola de algodón o una almohadilla cosmética de algodón con un poco de alcohol isopropílico (para frotar). Frota suavemente el residuo para aflojarlo y límpialo. El alcohol es muy eficaz para eliminar los residuos de laca para el cabello del vidrio. Tomarte un minuto para eliminar los residuos visibles diariamente hará que la limpieza semanal general sea mucho más fácil y rápida.
- Empieza por arriba. Ya sea que estés usando un limpiador de vidrio comercial o la mezcla de vinagre y agua , siempre comienza a limpiar en la parte superior del espejo. Si no puedes alcanzar la parte superior del espejo, tienes que asegurarte de usar un taburete resistente para evitar caídas. Rocía una ligera niebla del limpiador cerca de la parte superior del espejo. De esta manera, captará cualquier gota a medida que baje por el espejo. Utiliza un paño de microfibra sin pelusa para limpiar el espejo. Rocía una niebla adicional si es necesario.
- Dobla tu paño de microfibra en cuartos o en un paquete del tamaño de una mano. Esto le dará varios lados para usar mientras limpia. Muévase a un lado limpio, si es necesario, si el espejo está excepcionalmente sucio.
- Comprueba si hay rayas. Si no has usado demasiada solución de limpieza, el espejo debe estar seco cuando termine la limpieza. Hazte a un lado y revisa el acabado en busca de rayas. Si ves algunas manchas, usa un paño de microfibra limpio y seco para darle al espejo un pulido final.
Cómo limpiar los marcos de espejos decorativos
Limpiar los marcos alrededor de los espejos puede ser un poco más complicado que limpiar el vidrio en sí. Muchos marcos, especialmente la madera dorada antigua, pueden dañarse por la naturaleza ácida de los limpiadores de espejos caseros y comerciales. Se debe prestar atención a cualquier marco que rodee un espejo como parte del proceso de limpieza. Además:
- Evita el exceso de pulverización. Dado que los limpiadores ácidos pueden dañar la madera y algunos metales, es importante evitar el exceso de rociado en la superficie de los marcos. En lugar de rociar una niebla de limpiador directamente sobre el espejo, rocíalo sobre un paño de microfibra.
- Limpiar desde arriba. Comienza en la parte superior del espejo y limpia con el paño de microfibra humedecido con limpiador. Presta mucha atención a las esquinas para asegurarte de que estén limpias.
- Desempolva el marco. Con un paño de microfibra seco o un plumero desechable, desempolve con cuidado el marco. Si no puede llegar a la parte superior del marco, usa un taburete resistente. Un pincel nuevo y suave es particularmente útil para desempolvar marcos intrincadamente tallados.
- Revisa el marco en busca de manchas. Revisa el marco en busca de salpicaduras o manchas que deban eliminarse. Si ves un área que necesita limpieza, no uses productos químicos ni limpiadores abrasivos. Sumerge un paño de microfibra en agua corriente. Expriea hasta que esté ligeramente húmedo y limpia suavemente la suciedad en el marco del espejo.
- Comprueba si hay rayas. Cuando hayas terminado de quitar el polvo del marco, da un paso al lado y comprueba si el espero tiene rayas. Si ves algún residuo o algún residuo en las esquinas, usa un paño de microfibra seco para darle al espejo un pulido final.