Los muebles de madera antiguos no se deben tirar, puesto que son piezas únicas que además suelen tener una mejor calidad que los muebles actuales. Por eso si cuentas con este tipo de muebles o los encuentras a buen precio, puedes restaurar los muebles de madera con el fin de darles un nuevo uso.
Los muebles de madera no pasan de moda, son piezas de calidad, cálidas y con un material natural muy apreciado. Por eso debemos conservarlos y darles un nuevo uso, algo que se puede hacer si los restauramos. El proceso de restauración lo puede hacer cualquier persona en casa si cuenta con los materiales y las ganas.
Repasa bien el estado del mueble
Si vas a comprar el mueble o si lo has encontrado es bueno repasar bien el estado del mueble ya que algunos no se pueden restaurar o supondrán un buen coste. Es importante sobre todo que no tenga termitas que actúen en la madera, pues podríamos llevar una plaga a casa que pasase a otros muebles. Si la madera está bien debemos mirar si le faltan piezas fundamentales y si estas se pueden sustituir, además de ver el estado general del mueble y si nos gusta su diseño o este puede combinar bien en nuestro hogar.
Primer paso, preparar el mueble
Lo primero que debes hacer es poner el mueble en un lugar en el que puedas trabajar en él. A ser posible una habitación que puedas limpiar fácilmente. Cubre el suelo con telas o periódicos por si manchas y comienza con la restauración. El primer paso sin duda es limpiar el mueble bien para retirar polvo y suciedad. A continuación debemos retirar la pintura o barnices que tuviese. Normalmente se consigue con un lijado ligero pero puede que necesites disolvente si son muebles muy antiguos. Si tenemos que usar disolvente podremos seguir las instrucciones que nos da el fabricante. Suele aplicarse, dejarse actuar y después retirar con una espátula.
Repasa el mueble
Una vez tengamos la madera desnuda debemos fijarnos en si necesita algún tratamiento para la carcoma, algo muy importante. Si hay pequeños agujeros es que necesita ese tratamiento y tendremos que comprar un tapa poros con producto para eliminar esta plaga. Estos productos se deben dejar actuar. Son fáciles de aplicar y terminan con estos problemas de la madera. Es importante tratarlos porque la carcoma puede pasar a otros muebles y terminan estropeándolos. El tapa poros también sirve para los arañazos o daños que pueda tener el mueble. Se aplica, se deja secar y se usa la lija para igualar la madera.
Otra cosa que debemos hacer es mirar los tornillos, juntas y todas las piezas que puedan estar dañadas o que tengamos que sustituir. Puede que tengamos que comprar nuevos tiradores o añadir tornillos. Si hay zonas que quedan con desperfectos siempre podremos usar el tapa poros en esta fase para repararlos.
Pinta tu mueble
Puede que desees darle solo barniz o bien pintarlo. Es el momento de aplicar color a tu mueble. Se recomiendan las pinturas al agua porque son fáciles de corregir y se limpia fácilmente si se mancha con ellas. Utiliza brochas de calidad que estén bien limpias para aplicar la pintura y hazlo con cuidado, disfrutando de cada rincón. Esta es la parte en la que tenemos que tener más paciencia para que el mueble quede bien. Con el efecto de la pintura ya sabrás si necesita una o varias capas. Ten en cuenta que los tonos mate hacen que los desperfectos se noten más que aquellos que son satinados o brillantes, que al reflejar la luz disimulan mejor.
Cómo elegir el color del mueble
A la hora de elegir el color del mueble es una buena idea buscar inspiración. Ahora mismo se llevan muchísimo los muebles blancos. No obstante, si quieres que esa pieza antigua llame la atención, puedes utilizar un color que sea más llamativo y que destaque en las estancias. Desde el amarillo al azul o incluso un gris fuerte pueden hacer que ese mueble cobre vida de nuevo. Prueba los distintos colores y visualiza cómo quedaría un mueble en ese tono en la estancia en la que vas a añadir tu mueble restaurado. Ten en cuenta la decoración, el estilo y los tonos que has usado para que el mueble combine bien con todo.
Últimos retoques
Es importante que mientras tu mueble se seca lo tengas protegido de animales que puedan dañarlos, gente que lo pueda tocar o polvo y suciedad. Esto es necesario para evitar marcas que nos hagan volver a lijar y pintar. En el toque final debemos mirar que la pintura no necesita retoques y volver a añadir los tiradores que se retiran a la hora de pintar. Si además deseas que tu mueble antiguo tenga ese toque rústico o shabby chic entonces puedes utilizar de nuevo una lija para darle un aspecto desgastado a la pintura.