Es normal que con el paso del tiempo y con el uso la tapicería de las sillas o del sofá se vaya ensuciando y deteriorando poco a poco. Sin embargo no debes preocuparte porque con una serie de consejos de limpieza puedes conseguir limpiar a fondo la tapicería y dejarla otra vez como nueva y sin nada de suciedad.
Sal
La sal es un blanqueador natural y por eso es perfecto para eliminar manchas de la tapicería. Puedes aplicar un poco de sal diluida en vinagre o zumo de limón y frotar sobre la mancha hasta eliminarla totalmente. Otra opción consiste en diluir la sal en el agua y eliminar toda la suciedad que haya en la tapicería de las sillas.
Agua carbonatada
El agua carbonatada es otro excelente remedio casero para limpiar a fondo la superficie de las sillas o del sofá. Gracias a las numerosas burbujas y el gas que contiene, te permitirá acabar con la suciedad más complicada y difícil de quitar.
Bicarbonato de sodio
El bicarbonato de sodio es otro producto natural que no puedes olvidar a la hora de limpiar la tapicería de tu casa. Pon un poco de bicarbonato encima de la superficie y deja actuar durante unos minutos. Retira el producto con un cepillo y te sorprenderás de como las manchas y la suciedad desaparecen. Otra opción igual de válida consiste en diluir el bicarbonato en vinagre o limón.
Limón
El limón es otro de los mejores productos naturales que existen para eliminar las manchas. Además de ser un excelente blanqueador, ayuda a desinfectar la zona sin dañar el tejido en cuestión. Puedes optar por aplicar directamente el zumo de limón en la tapicería o diluirlo en agua. Una vez haya usado el limón, es importante dejar secar al aire para que la tapicería quede como nueva.