No es lo mismo decorar una habitación individual que una de matrimonio ya que en esta última se deben tener en cuenta los gustos decorativos de las dos personas que van a compartir la habitación. Es por ello que es esencial crear un espacio que resulte agradable y cómodo para ambas personas.
Con los siguientes consejos no tendrás problemas a la hora de decorar la habitación de matrimonio.
Los colores neutros como el gris claro, el beige o el blanco son los que deben prevalecer en una habitación de matrimonio. Estos colores ayudan a crear un espacio agradable y tranquilo en el que descansar perfectamente después de una larga jornada de trabajo. En relación a la cama debe ser bastante amplia y cómoda para que ambos cónyuges puedan dormir sin problemas. No hay que olvidarse de las mesitas de noche ya que son perfectas para dejar diferentes pertenencias y objetos personales.
El armario debe ser lo bastante grande para que los dos cónyuges puedan guardar su ropa de forma ordenada y organizada. El estilo decorativo debe buscar la sencillez ya que la habitación de matrimonio es un lugar de la casa creado para el descanso. A la hora de escoger la iluminación debe de ser tenue y relajante para crear un ambiente agradable en toda la habitación de matrimonio. Aparte de la luz prinicipal, no puede faltar algo de iluminación alrededor de la cama que ayude a relajar el ambiente.
En cuanto al tema de los textiles como es el caso de la colcha o de las cortinas, hay que evitar los estampados y optar por colores neutros que combinen con el resto de la decoración de la habitación. El tipo de cama te ayudará a escoger el tamaño y el número de cojines que debes poner encima de la misma.