Fueron las fotografías del fantástico portfolio de Petra Bindel las que me han llevado a buscar propuestas de decoración que incluyan cuadros escoceses. Este característico estampado de cuadros y líneas con anchos y colores diferentes es popular entre los accesorios textiles, pero se puede encontrar en otros muchos usos.
También llamado “Tartán”, su origen se remonta al siglo XVIII y su simbología se asocia a lo tradicional. No es de extrañar, por tanto, que su uso en la decoración sea mas frecuente en espacios tradicionales y/o rústicos. Espacios cálidos en los que los cuadros escoceses se ven representados en paredes, alfombras, ropa de cama o sillas.
Estamos acostumbrados a que los cuadros escoceses ocupen un papel importante en el mundo de la moda; pero no lo estamos tanto a encontrarlos en el mundo de la decoración. Es frecuente encontrar este estampado en ropa de cama y otros textiles, pero no lo es paredes y/o muebles.
Sobre una cama vestida en colores neutros, una manta o funda nórdica con cuadros escoceses puede resultar una buena alternativa. Si apostamos por un estampado en colores alegres la habitación ganará luminosidad, si por el contrario apostamos por marrones, verdes y/o azules oscuros, colores mas tradicionales, fomentamos ese sabor tradicional del que hemos hablado antes.
Hay que ser atrevido para utilizar un papel pintado de cuadros escoceses. Es un estampado que llama mucho la atención y que como tal, es preferible utilizar en pequeñas dosis. Podemos utilizarlo en el hall para llamar la atención sobre un bonito mueble de madera, o en una habitación «compartida» para delimitar zonas como la del comedor o despacho…
Y lo mismo que en las paredes podemos utilizar los cuadros escoceses para cubrir el suelo con cálidas alfombras. Lo mas habitual es apostar por este tipo de alfombra en el salón, un espacio en el que también resulta una buena alternativa colocar una butaca tapizada con este estampado. Junto a la chimenea imprimirán ese toque tradicional, «de pueblo» ¿y en el comedor? Mejor si, como en la imagen, nos limitamos a una o dos sillas; eso si, en colores llamativos para darle un toque moderno.