En el recibidor damos la bienvenida a los invitados, esperamos a los rezagados de la familia, colgamos nuestros abrigos y «tiramos» nuestro bolso al llegar a casa. Es una estancia en la que pasamos poco tiempo, pero que dice mucho mas de nosotros de lo que pensamos.
¿Como lo decoramos? Si nos mandasen elaborar una lista de muebles «imprescindibles», que resulten especialmente prácticos en esta estancia, no nos olvidaríamos de incluir un banco. Ya sea éste un banco de madera sencillo, de carácter rústico o rico en detalles; resultará muy útil.
Un banco de madera en un recibidor resulta útil por tres razones: Nos permite cambiarnos de calzado si la necesidad de hacer equilibrios, nos proporciona espacio de almacenaje extra y nos hace mas llevadera la espera ¡porque siempre hay alguien que espera!
Podemos colocar cosas encima del banco, pero también debajo. Encima, podemos dejar el bolso, debajo, los zapatos u otros accesorios ordenados en grandes cestas. Podremos aprovechar además el espacio superior para colocar un espejo, unos cuadros o un perchero en la pared para colgar los abrigos.
Teniendo un banco de madera como centro, podemos lograr un conjunto sencillo y práctico al mismo tiempo con pocos elementos. La elección del tipo de banco dependerá, por supuesto, del estilo que desees darle al recibidor, pero también del espacio disponible en el mismo.
Escoge un banco sencillo de pequeñas dimensiones y bajo si cuentas con poco espacio. Busca maderas naturales o diseños mas «brutos» si deseas darle a tu recibidor un aire rústico. Y apuesta por un banco sólido y rico en detalles si el espacio no es un problema.
Un cuadro, un espejo de pie, una alfombra, un perchero y/o algún jarrón pueden ayudarte a completar el espacio y hacerlo mas acogedor. No dudes en combinarlos de diferentes maneras y en diferentes posiciones hasta dar con aquella que mas te guste.