Esta filosofía oriental del Feng Shui le da mucha importancia a los elementos del hogar para crear espacios que nos aporten buena energía. En ella nos hablan de los detalles y pautas que hay que seguir para que un espacio en el hogar tenga energía positiva y eso repercuta para bien en nuestro ánimo y en nuestro carácter y como consecuencia en nuestra salud.
En esta ocasión veremos algunas de las pautas para decorar el comedor según el Feng Shui. En esta técnica no solo nos hablan de la mejor disposición de los muebles y las estancias de la casa, sino también de los materiales y los detalles que hay que añadir para que sea un lugar apto para el Feng Shui.
La ubicación del comedor para el Feng Shui es la parte frontal de la casa, cerca de la cocina y sin que se vea desde la entrada. Esto lo podemos escoger si estamos diseñando la casa. Si no es posible cambiarlo, por lo menos podemos centrarnos en los otros aspectos de esta filosofía.
El color tiene mucho que ver con nuestro estado de ánimo, y por eso debemos utilizar tonos que sean relajantes y también acogedores. Sugieren tonos que inviten a la comida, como rojos, naranjas o amarillos, que además son alegres para un espacio en el que se reúne toda la familia. Hay que evitar tonos oscuros o fríos que no resultan muy confortables o acogedores en este espacio. La calidez ayuda a estimular el apetito y a sentirnos más a gusto.
En cuanto a los materiales a utilizar en el comedor, sugiere la madera porque se relaciona con la relajación y el confort en el hogar. También el metal, pues lo asocian a la buena nutrición. Hay que evitar el cristal, pues incita al nerviosismo al tratarse de un material más frágil e inestable, además de menos cálido.