La cocina es uno de los lugares que actualmente se toman más en consideración en el mundo del interiorismo. Al fin y al cabo, es el lugar donde se pasa mayor parte del tiempo en familia. Por este mismo motivo, tiene que ser lo suficiente espaciosa como para que pueda estar toda la familia al mismo tiempo comiendo o esperando a que la comida esté lista. Además, en pisos compartidos los inquilinos suelen cocinar al mismo tiempo. Motivo por el que suele ser bastante impráctico estar codo con codo luchando por no invadir el espacio del otro o que no te salte el aceite de la sartén del otro mientras tú te encuentras removiendo tu chocolate caliente.
Sin embargo, las cocinas también han sido consideradas uno de los lugares más románticos. ¿Quién no tiene la imagen de la abuela preparando su delicioso pastel cuando uno era niño mientras pedía a gritos que por fin salieran las galletas recién horneadas? Una de las imágenes recurrentes en las películas que intentan evocar tiempos pasados son esas cocinas en piedra, en tonos claritos.
El único defecto de estas cocinas es que son completamente imprácticas hoy en día, pues las necesidades han cambiado. En los noventa se solían hacer casas en las que la cocina iba por un lado y el salón por otro. A partir del siglo XXI, este concepto cambió y ahora se opta por fusionar las cocinas con el salón. El estilo que se use depende de tu gusto. No obstante, yo optaría por una fusión de dos estilos: un estilo funcional en el que uno puede comer en las encimeras y que al mismo tiempo pueda ver el televisor del salón justo enfrente y una estética romántica que nos recuerde a la cocina nuestra abuela.
Esta es mi propuesta. Démosle un toque romántico a nuestra cocina. ¿Por qué no intentamos conjugar estas dos cosas en un diseño completamente actual pero con esa magia de las cocinas del pasado que tanto evocamos? Imagina por un momento una radio en la que suena uno de los éxitos de Billie Holiday; junto a la radio, unas encimeras de colores claros de madera; una mesa y un estante repleto de libros de cocina de madera de apariencia desgastada pintado todo en azul claro con algo de verde y gris, manteles con lunares rojos, unas velas en el centro de la mesa con los platos dispuestos, una botella de vino, en el horno preparándose unos deliciosos cupcakes, grandes ventanales decorados con cortinas de un tono rosa palo que dejan nuestra cocina salón completamente iluminada. Y ahora, ¡haz realidad tus sueños!
A continuación, se puede ver una imagen de un estante de madera desgastada decorado con platos de diferentes tamaños.
Y es que los platos pueden hacer bien su función decorativa tal como se puede ver en las siguientes cocinas amuebladas con encimeras y madera de tonos diferentes, pero con el estante con platos detrás la primera en tono azul grisáceo y la segunda en tono beige.
Cuelga tus trapos de lunares en tu cocina y combina con fundas para tus sillas de madera desgastada para dar un interesante contraste muy vintage.
Y, lo más importante, no olvides que en el mundo de la decoración es posible hacer realidad todos tus sueños.
Más información – El estilo escandinavo: luminoso, amplio y funcional
Fotos – katescreativespace, decoraideas, estiloydeco, decodeliziosa y blog.redecora.me