Los espejos de pie son un elemento decorativo excepcional; consiguen transformar completamente los espacios donde se colocan. Además de dar una sensación de continuidad, amplitud y profundidad, este tipo de espejos en particular, aportan además un toque romántico al espacio. Un elemento práctico y decorativo que ofrece resultados extraordinarios.
Resulta sencillo encontrar el espejo perfecto para cada espacio; los hay de diferentes tamaños y formas, modernos y vintage, con marco y sin marco, metálicos o con acabados metálicos. Darán un toque personal y elegante a la habitación y reflejarán la luz, además de todo aquello que nosotros queramos destacar de la habitación.
Los espejos de pie son perfectos tanto para el recibidor como para el dormitorio. Reflejan la luz, por lo que aportan luminosidad a los espacios y nos permiten crear sensación de amplitud. Para elegir el espejo adecuado debemos pensar tanto en el espacio disponible en la habitación como en el color y estilos de la habitación.
Un espejo de resina o madera con acabado plateado encajará a la perfección tanto en dormitorios modernos de líneas limpias como en uno rústico. Las esquinas labradas u otros elementos decorativos ayudarán a enriquecer el espejo aumentando no solo su valor sino su poder de atención. Los encontraréis desde 90€ en las tiendas de muebles y decoración.
En una habitación rústica o bohemia, los espejos de madera bruta o envejecida pueden ayudar a reafirmar el estilo. Lo mismo ocurre con los espejos de pie en tonos pastel en las habitaciones románticas o los de marco negro en sofisticadas habitaciones blanco/negro
Una vez escojamos el espejo, debemos colocarlo en el sitio adecuado. El espejo reflejará aquello que se encuentre en la pared opuesta por lo que debemos intentar que ésta no se una pared fría o daría sensación de vacío. Debemos prestar atención a la decoración que se verá reflejada.
Imagenes – Pinterest, Weheartit, Linen Haus Design
Fuente – Aires de decoración