Si os gustan las manualidades, seguramente conozcáis el Washi Tape, esas tiras adhesivas que cuentan con un sinfín de patrones, y que han dado lugar a muchísimas ideas DIY geniales. Como hay tantos colores y estampados en estas tiras, es posible hacer todo tipo de diseños en todas las superficies, tratándose de un material muy versátil.
Hoy os mostraremos cómo hacer unos divertidos cuadros de Washi Tape. Es la solución ideal si vivís en un espacio de alquiler o no queréis gastaros el presupuesto en caros cuadros. Además, es tan barato, que podréis cambiarlos cuando lo deseéis, así de fácil.
El washi tape negro es ideal para decorar una habitación con el estilo nórdico, que usa blanco y negro en su gran mayoría. Enmarcando unas láminas infantiles ya tienes un aspecto minimalista y una pared decorada con un presupuesto low cost. Y puedes hacer otras formas e incluso palabras o letras. Si alguno no te convence, con quitarlo ya está.
Para un estudio en el que queremos un aspecto creativo que ilumine nuestras horas de trabajo, tienes adhesivos en varios tonos combinados. Según la fotografía o la lámina, podrás usar diversos colores y también crear formas geométricas que quedan muy bien y adornan. Puedes usar colores como el dorado, el neón, todo depende del estilo que estés buscando.
En el salón, puede que quieras llenar la pared con frases o con recuerdos. Nos encanta la idea de las fotografías en formato Instagram, algo muy actual y divertido. En el otro lado tienes una idea más seria, pero igual de original. En este caso, hay cuadros básicos, rodeados por el washi tape en varios tonos. El resultado es muy alegre y lleno de detalles.
Sé el primero en comentar