"La Paisible", Audrey Hepburn decoradora

Entrada principal de La Paisible

Se ha producido el 20º aniversario de la muerte de Audrey Hepburn, pero sus actuaciones y su labor humanitaria, además de su inimitable estilo, belleza natural e innato porte aristocrático, nos siguen cautivando e inspirando a todos los niveles. Curiosamente, la actriz también destacó por sus dotes como decoradora, que pudo poner en práctica con total libertad en «La Paisible», la casa de campo que compró en Suiza cuando estaba casada con Mel Ferrer y que fue su residencia durante el resto de su vida.

Junto a los Alpes y el lago Leman, la casa es una construcción de piedra original del siglo XVIII con portón blanco, y en los 60 contaba con un gran jardín trasero repleto de rosales, algo salvaje y casi sin veredas. Hoy día es propiedad privada y no se puede visitar, pero miles de fans se acercan a ver la casa, un pabellón cercano que se edificó en su memoria, y el lugar donde descansan sus restos en el cementerio de Tolochenaz, el pueblo de agricultores en el que Audrey solía hacer vida social, lejos de los flases de Hollywood.

Una parte del jardín de La Paisible

Los interiores rebosaban delicadeza y feminidad, y muestran esa concepción reposada de la belleza y la elegancia que caracterizaban a la actriz. En las pocas imágenes con las que contamos queda patente su gusto por la vida sencilla y su discreción, eligiendo el blanco como base decorativa con acentos en tonos pastel, principalmente azules, verdes y rosas. Los materiales también definen ese espíritu reposado en mobiliario y complementos: Mimbres, maderas lacadas y tejidos naturales como el algodón y el lino. Las flores eran el claro denominador común en jarrones, centros, motivos estampados o cojines, como una prolongación de su jardín.