La decoración de la habitación de un bebé siempre es un momento muy especial para los padres, aparte del mobiliario el otro aspecto a tener en cuenta es elegir los colores adecuados para el dormitorio.
No todos los colores son iguales y dependiendo de la tonalidad usada, el ambiente creado en la habitación será uno u otro influyendo en el estado de ánimo del pequeño.
Colores claros
El dormitorio de tu pequeño debe ser un espacio tranquilo y donde pueda dormir y descansar perfectamente, es por ello que lo mejor es usar colores claros que ayuden a crear ese ambiente de relax tan propicio para tu bebé. Lo más aconsejable es decantarse por tonos como el blanco, el beige o el celeste que ayuden a crear un espacio relajante en todo la habitación.
Cuidado con la pintura
Una vez que hayas elegido el color perfecto para el dormitorio, debes tener mucho cuidado con la pintura usada para tal decoración. Debes ser una pintura totalmente homologada y que no contenga sustancias tóxicas que puedan desprender algún que otro olor dañino para la salud de tu bebé. Lo mejor es optar por las pinturas ecológicas que no tienen ningún tipo de elemento tóxico. A la hora de pintar hazlo con varios días de antelación y ventila muy bien todo el dormitorio.
Combina colores
Como te he comentado anteriormente, el color blanco es uno de los más aconsejables a la hora decorar la habitación de un bebé. Es un color que transmite tranquilidad y relax en el ambiente, sin embargo puede resultar un poco frío.
Por ello, es aconsejable combinarlo con otras tonalidades para conseguir un toque de alegría en todo el dormitorio. Otra opción es combinar el color blanco con simpáticos vinilos decorativos consiguiendo un toque muy infantil en dicho espacio.
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