Los paneles perforados nos sirven como un espacio funcional para colgar y organizar cosas. En realidad, en un principio solamente les veíamos esta función tan sencilla. Se solían utilizar tal cual, en color blanco y sobre la pared, para tener un espacio vertical de organización.
Ahora, los paneles perforados han ido un paso más allá en las webs de manualidades, para poder darles un aspecto más decorado y divertido. Pintarlos y sobre todo poder hacer patrones sobre ellos es la nueva moda para aportarles personalidad a estos tableros de trabajo que ya se han convertido en parte de la decoración del hogar.
Para darles un aspecto totalmente nuevo, solo tienes que coger unos hilos resistentes y gruesos, como de lana, y realizar punto de cruz sobre ellos. Si sabes algo de costura, te resultará muy fácil hacer patrones y figuras en colores sobre estos paneles.
Y ahora no solamente sirven para áreas de trabajo, sino que también los podemos ver como cabeceros de cama. Con hilos que van a juego con los textiles de cama y los cojines. Es una forma de combinarlo todo fácilmente. O también de una forma más elegante, con hilos blancos que apenas se ven, pero que añaden textura al cabecero.
Estos patrones se utilizan igualmente en un espacio de trabajo en el hogar. Sobre todo para esos cuartos de costura que tanto abundan hoy en día. Son figuras que se pueden sacar fácilmente de revistas sobre punto de cruz, en donde hay toda clase de dibujos, desde letras a flores y personajes divertidos. Y no se necesitan muchos materiales. Estos paneles que se encuentran en ferreterías, y que se pueden encontrar en diferentes medidas. Se ponen sobre la pared y se decoran con hilos gruesos en diversos colores, como si cosiésemos en una gran tela.