Hay muchos motivos para querer dividir un espacio en dos, ¿necesitas algunos ejemplos? Hemos empezado a trabajar desde cada y necesitamos un despacho, tenemos una vivienda de concepto abierto y queremos aislar los olores de la cocina… en estas y otros supuestos, las paredes acristaladas pueden representar un buen recurso.
Podríamos levantar un tabique, pero no queremos aislar completamente la habitación. Buscamos una propuesta que sea capaz de mantener cierta continuidad visual entre los diferentes ambientes y al mismo tiempo, aporte estilo a la estancia. Y buscando, damos con la solución: grandes ventanales con cuarterones de metal.
Ventajas de las paredes acristaladas
Las paredes acristaladas nos permiten separar diferentes espacios sin la necesidad de levantar un tabique. Esa es una de las grandes ventajas de este tipo de estructura, pero hay otras no menos importantes tanto a nivel práctico como estético que enumeramos a continuación.
Las paredes acristaladas…
- Separan diferentes ambientes físicamente, pero no visualmente.
- Permiten la entrada de luz natural al segundo espacio.
- Son ligeras y como tal, apropiadas en espacios reducidos.
- Son atractivas visualmente; se convierten en un elemento decorativo mas.
- Se adaptan a habitaciones de estilos muy distintos; encajan a la perfección tanto en espacios clásicos como contemporáneos o rústicos
¿Cómo utilizamos este tipo de pared?
Podemos utilizarlas en grandes espacios de concepto abierto para generar diferentes ambientes. Podemos separar el dormitorio de los espacios comunes de un loft o la cocina del salón/comedor, incorporando a la pared acristalada una puerta batiente o corredera si deseamos ahorrar espacio.
También se utilizan para separar el recibidor del salón o crear un espacio de trabajo en cualquiera de las habitaciones. Otra forma muy original de incorporar este tipo de pared acristalada con cuarterones de metal a nuestro hogar, es creando pequeños oasis verdes; patios interiores realmente atractivos.
Las paredes de cristal son una buena opción cuando existe bien la necesidad de crear un espacio nuevo, bien la de separar dos ambientes ya creados. Poseen numerosas ventajas funcionales y estéticas y como habéis podido comprobar a través de las imágenes, se adaptan a ambientes de estilos muy distintos. ¿Os gustan?