Los materiales utilizados en el diseño de interiores se reinventan constantemente. Materiales nuevos irrumpen en el sector a diario restando protagonismo a materiales tradicionales que se resisten a desaparecer. El pavés es uno de esos materiales cuyo uso se ha mantenido a lo largo de los años.
El pavés fue muy popular en construcciones industriales que buscaban ganar luminosidad sin renunciar a la privacidad. En nuestros hogares, irrumpieron con fuerza por su gran potencial estético y funcional. Un potencial al que hoy podemos seguir sacando partido tanto en exteriores como en interiores. ¿Cómo? Te lo contamos.
¿Qué es el pavés?
El pavés es un bloque de vidrio moldeado traslúcido que incluye una cámara de aire en su interior. Se utiliza para realizar cerramientos, tanto interiores como exteriores, con funciones constructivas y/o decorativas siendo su característica mas atractiva el paso de la luz a través de él.
El tamaño de un bloque de vidrio estándar es de 19x19x8 cm, aunque existen piezas, al margen de los formatos cuadrados, con otras medidas y formas especiales: medios bloques, esquinero o finales de columna. Poseen generalmente grosores que no superan los 8 cm. siendo 5cm el grosor mínimo.
Además de tener diferentes formas y tamaños, el pavés se presenta también con distintos acabados. Desde las superficies lisas a las planas pasando por onduladas, con dibujos o imitando texturas. Y lo mismo ocurre con el color; es posible encontrar piezas incoloras o de color, traslúcidos u opacos.
Características técnicas
A pesar de que hoy en día se fabrica pavés con una elevada resistencia a la compresión, este no debe utilizarse como elemento estructural o dicho de otra forma, con el objetivo de construir un muro de carga. ¿Por qué? Porque no aguanta otros pesos que no sean el suyo.
Sin embargo si pueden construirse muros con grandes prestaciones de aislamiento térmico y acústico, gracias a la cámara de aire que se encuentra en cada una de las piezas. Los muros fabricados con ladrillos de vidrio son además impermeables, resistentes e ignífugos (protegen del fuego, el calor y el humo).
Por sus características técnicas el pavés tiene además un mantenimiento sencillo. Basta con un poco de agua y jabón para dejarlos como nuevos, facilitando su limpieza.
Usos del pavés
El pavés permite delimitar espacios sin limitar la luminosidad de los mismos. En esa característica se asienta su principal aplicación, la de cerrar total o parcialmente espacios que permitan la entrada de luz entre estancias contiguas o desde el exterior.
Pavés en muros exteriores
La luz natural confiere a los escenarios un carácter único. No es un secreto además que cuanta mayor es la entrada de luz natural, menos es nuestra factura eléctrica. No es de extrañar, por tanto, que el pavés se utilizase y aun se utilice en zonas exteriores, terrazas o fachadas, tanto como para un paramento completo como en una porción de él.
Dejar que la luz natural inunde el recibidor o el salón suele ser la aplicación mas frecuente de los muros de pavés exteriores. También son muy utilizados los muros de pavés en el cuarto de baño, principalmente en la ducha, para conseguir el efecto de una ducha al aire libre.
Muros interiores divisores
Como ya hemos dicho anteriormente, separar una habitación de otra es una de las aplicaciones mas populares del pavés en nuestros hogares. Se consigue así que los espacios sean independientes y estén acústicamente aislados, pero sin limitar el paso de la luz de uno a otro. Una característica muy interesante cuando uno de los dos carece de ventanas o es muy oscuro.
Es común encontrar el pavés separando el despacho del salón o el cuarto de baño del dormitorio. Habitaciones que han sido creadas, generalmente, robando espacio de otras y que por tanto no gozan de ventanas que las conecten con el exterior. Las paredes de cristal se convierten en esos casos en el mejor aliado para ganar luminosidad.
Muros de pavés en el baño
El cuarto de baño es el escenario en el que los bloques de vidrio se concretan en mamparas o muretes para separar ambientes. Complementar un murete de pavés con una puerta de vidrio es una gran alternativa para cerrar la ducha o la bañera. Además, podemos utilizar el pavés para dotar de cierta intimidad a la zona del váter.
En contra de lo que pueda parecer y como hemos podido comprobar el uso del pavés o los bloques de vidrio no está limitado al baño. Aunque este sea el uso mas extendido, es frecuente encontrarlo separando habitaciones o diferentes ambientes en una sola habitación. Además son una gran alternativa cuando queremos que la luz natural inunde el interior de nuestros hogares.
¿Te gusta el pavés? Aunque pueda parecerte un material anticuado, hoy en día su uso está volviendo a crecer especialmente en la creación de espacios comerciales.
Es una excelente forma de captar la luz y darle luminosidad a un espacio oscuro.
Saludos. 🙂
Ha habido unos años que no se ha utilizado mucho pero es una gran solución y ¡todas las modas vuelven!