Utilizar sillas diferentes tanto en la mesa de la cocina como en el comedor se ha convertido en toda una tendencia. Además de práctica, esta tendencia resulta llamativa y aporta creatividad al espacio bien sea de carácter rústico o moderno. Podemos jugar con el diseño de las sillas o bien con el color, está en nuestras manos elegir.
Esta tendencia resulta decorativa y brillante por la multitud de ventajas que conlleva. La primera y quizá la mas importante es que podemos reutilizar sillas viejas, heredadas o de otras habitaciones y ahorrar dinero en el diseño. Otra ventaja reside en que cada miembro de la familia puede escoger la silla que le resulte más cómoda.
Las cocinas con muebles blancos son las que nos permiten jugar de forma más sencilla con el color. En una cocina moderna y diáfana podemos combinar sillas de una amplia gama de colores sin miedo a equivocarnos. Debemos, eso si, tener en cuenta que cuanto más llamen la atención los colores mas se focalizará la atención en este rincón de la cocina.
Si deseamos que la mesa se integre en el espacio y pase más “desapercibida” es preferible apostar por los colores pastel, los blancos y los tonos naturales y guardar cierta coherencia en el diseño de las sillas: todas de madera, todas de plástico… estaremos logrando una mayor serenidad al ambiente.
Si la cocina es de estilo rustico será preferible apostar por tonos neutros o metalizados en las sillas. Los materiales metálizados, así como los colores, conjugan a la perfección con la madera creando un equilibrio frio-calido muy interesante.
Esta interesante tendencia no tiene normas ni reglas establecidas. Puedes jugar con las sillas que ya tengas en casa y renovarlas con una capa de pintura. O puedes acudir a mercadillos, tiendas de muebles de segunda mano y adquirir aquellas sillas que llamen tu atención.
Mas información – Las ventajas de decorar en tonos pastel
Imágenes – Scandinavian Deco, Apartment therapy, Grey and Scout, Pinterest
Fuente – Scandinavian Deco