Dotar a la cocina de los recursos necesarios hará que trabajar en ella resulte mas sencillo y supondrá un ahorro de tiempo considerable en el futuro. Sistemas de almacenaje como armarios, cajones y alacenas se convierten en imprescindibles en estas pero existe otra alternativa a contemplar: la estantería de cocina.
Una estantería de cocina es un sistema de almacenaje mas económico -no siempre- pero no menos funcional. Dejar a a vista platos, vasos o ingredientes que utilizamos a diario en las mismas y reservar las puertas de los armarios para otros útiles puede ser una buena estrategia en consonancia, además, con las tendencias actuales.
Las estanterías se han convertido en la última década en un elemento de tendencia en las cocinas, como ya lo fueron décadas atrás. La idea de esconder todo tras las puertas de los armarios parece ahora anticuada. Mantener el orden en un sistema de almacenaje abierto puede parecer una tarea ardua, pero existen hoy numerosas herramientas para contrarrestarlo como podrás comprobar en las siguientes propuestas.
De madera
Las estanterías de madera representan una alternativa sencilla y siempre atractiva en nuestras cocinas. Se convierten en el contrapunto perfecto a los armarios altos para conseguir una cocina equilibrada, pero también pueden ser utilizadas en espacios mas grandes de pared a pared. Son perfectos para colocar los platos, vasos y tazas de uso diario, pero también para crear prácticas despensas si se completan los estantes con botes de cristal que nos sirvan para organizar pasta, legumbres y cereales, entre otros.
Las maderas claras son las mas populares para crear este tipo de estantes en cocinas de carácter tanto tradicional como moderno. Aunque si quieres darle un aspecto mas rústico a este espacio, lo ideal es apostar por maderas mas oscuras y veteadas e incorporar algún tipo de ángulo metálico.
Metálicas con ruedas
Las estanterías metálicas han sido siempre grandes aliadas para cubrir necesidades de almacenaje. En muchos hogares lo han sido de forma provisional, por su bajo coste y su gran funcionalidad. Hoy, sin embargo, son una alternativa de tendencia, especialmente aquellas de inspiración industrial y con ruedas.
La ligereza visual de estas estanterías las convierte en una gran opción para ganar espacio de almacenaje en espacios pequeños. Sin embargo, de nada servirá esta características si se llenan de forma desmesurada y desordenada. Lo ideal es destinarlas a un uso muy concreto, ya sea organizar la vajilla, colocar todos los útiles para prepararte un café o hacer u sitio en la cocina a frutar y verduras.
Estanterías tipo nicho
Aprovechar ciertas características arquitectónicas de un espacio para crear de forma sencilla estanterías siempre ha sido una alternativa que ha estado ahí. Podemos crear una estantería de obra teniendo en mente esto o utilizar los huecos entre dos paredes o dos armarios para lograr la misma sensación después.
Hay dos estrategias a seguir diferentes para acertar con este tipo de estantería de cocina. La primera es apostar por el mismo color en pared, muebles y estantes, logrando así un conjunto que aporte continuidad a la cocina. La segunda es utilizar materiales o pintar la pared y los estantes con un color que contrasten con el resto de elementos para llamar la atención sobre esta.
En Decoora nos parecen un acierto este tipo de estanterías en grandes paredes con el fin de utilizarlas como despensa. Utilizar elementos que mantengan cierta armonía en las mismas será la clave para mantener el orden. Pero también ayudará subdividir cada estante, como ocurre en la última imagen.
Modulares y configurables
Este tipo de estanterías a la venta en Ikea o Haus son un acierto en cualquier rincón de la casa. Son estanterías modulares y configurables. ¿Eso que significa? Que puedes escoger entre diferentes módulos y diferentes accesorios diseñados para estos con para configurar la estantería perfecta para ti, aquella que se adapte a todas tus necesidades.
La clave de estas estanterías son las guías que fijadas a la pared permiten incorporar después diferentes módulos diseñados para cubrir diferentes necesidades. Desde armarios, hasta estantes, pasando por cestas o barras para colgar cosas. La capacidad de personalización dependerá de lo que la propia empresa haya proyectado.
La ventaja de las estanterías modulares configurables, aun con una personalización mínima, es que podrás combinar soluciones de almacenaje abiertas y cerradas y ampliar o modificar en un futuro la estantería en caso de que tus necesidades cambien. ¿La desventaja? Un precio mas elevado que algunas de las otras opciones.
Estas son solo algunas de las opciones que tenemos para aumentar el espacio de almacenaje de la cocina utilizando estanterías. Las hay con diseños muy variados, fabricadas con materiales distintos y en colores distintos. No te resultará difícil encontrar una que se adapte a tu cocina y tus necesidades. Y si lo es, siempre podrás recurrir a estanterías configurables o construirla tu mismo, ¿por qué no?