Aunque podríamos definirlo de diferentes maneras, lo cierto es que estamos más bien ante un enorme y exclusivo ático loft, situado en lo alto de un singular edificio localizado en DUMBO, uno de los barrios entre los puentes de Brooklyn y Manhattan.
Se trata de una vivienda impresionante y única. Aunque echemos un vistazo a portales locales como enalquiler.com como esta el alquiler de pisos de lujo en las grandes ciudades no encontraríamos nada como esta joya de loft.
Realmente este piso ‘triplex’ tiene varias cosas inusuales. La primera de ellas y que capta nuestra atención son los cuatro enormes relojes de la fachada, ubicados en cuatro ventanas de cuatro metros de altura, que le confieren un encanto muy especial y lo distinguen del resto de viviendas. Son su auténtica seña de identidad.
Como dato curioso, el nuevo dueño de la vivienda no tendrá que preocuparse de poner los relojes en hora ya que los cuatro están sincronizados electrónicamente, mostrando exáctamente la misma hora.
La planta principal de la vivienda, moderna y elegante, está dominada por los relojes y las increíbles vistas sobre los cuatro puntos cardinales. También apreciamos una funcional cocina.
En el segundo piso, de 213 m², hay tres dormitorios y los cuartos de baño.
Un ascensor con paredes de vidrio y una escalera conecta las tres plantas que se van estrechando conforme ascendemos.
El apartamento fue ideado por David Walentas, creador del histórico barrio de DUMBO, en un antigüo edificio industrial, cuyo nombre cambió con el tiempo bautizándolo como The ClockTower Building. Igualmente también cambió su uso, de fábrica a oficinas y posteriormente apartamentos.
Sin duda, uno de los mayores alicientes de este exclusivo penthouse son las vistas sobre el Puente de Brooklyn, uno de los grandes iconos de la ciudad que nunca duerme. Veamos el video.
¿Os imagináis el precio por el que se ha vendido? Nada menos que la cifra récord de $25 millones, más del doble de lo que nunca se ha pagado por una casa en Brooklyn… y todo un diamante en bruto para su decoración.
Photo: Ángel Franco/The New York Times
Oh por Dios!! has echado abajo todos los sueños de mi casa ideal! Ya no podré vivir sin imaginarme viviendo allí. La cifra para mí está absolutamente OK, yo los habría pagado con gusto (claro, si fuera un exitoso empresario o heredero lol). De verdad es el lugar más mágico que haya visto en mi vida, y sin perder lo elegante, cómodo y moderno.
Excelente artículo.