Si estas aburrida de tus sillas, sustituirlas por otras no es la única solución. Existe otra mas económica y creativa que te permitirá cambiar su apariencia sin demasiado esfuerzo. Por supuesto hablamos de pintarlas, pero de forma diferente y original. Se acabo pintarlas de arriba abajo en un mismo color.
¿Os acordáis de las propuesta que os lanzábamos recientemente par pintar las paredes? Algo similar podemos hacer con las sillas. Se trata de jugar con las texturas y el color, pintando únicamente las patas o el respaldo; estoy segura que con las imágenes que hemos seleccionado para ti, lo entenderás mucho mejor.
La ventaja de esta propuesta es que permite adaptar las sillas a la decoración; imprimiendo un toque de color a las mismas. Basta con pintar unos pocos centímetros de las patas para lograr un efecto realmente llamativo. Los colores neón o pastel son los favoritos para ello.
Antes de ponerte a pintar deberás tantear el estado de tus sillas. Si estas se encuentran en buen estado, podrás transformarlas pintando bien las patas bien el respaldo, dejando de esta manera parte de la silla original a la vista. En las sillas de madera queda especialmente llamativo este efecto.
¿Tus sillas están en mal estado? Elige dos colores y delimita la zona que pintarás de uno y otro color. Es importante que elijas una buena pintura, adecuada al material sobre el que vas a pintar. En tu ferretería habitual sabrán aconsejarte y mostrarte las mejores opciones.
Pintar de esta manera las sillas no te supondrá un gran esfuerzo; no necesitarás invertir demasiado tiempo y económicamente te saldrá rentable. Para pintar una silla de madera te bastarán unas pocas herramientas: agua y jabom, un trapo para secarla y limpiarla, una lija, brocha y pintura.
Mas información –Paredes pintadas a media altura ¡atrévete!