El de los estores es todo un universo decorativo propio con multitud de opciones, materiales, funciones y acabados; además de estar directamente relacionado con el mundo de la costura y las manualidades. Sería imposible resumirlos todos en un post, pero me gustaría escoger una pequeña selección a modo de inspiración para destacar sus infinitas posibilidades.
Uno de los modelos más refinados es el denominado panel japonés (que toma su nombre de las tradicionales casas niponas de paredes móviles), habitualmente distribuido en paños verticales que van colgados sobre raíles de varias vías y se mueven de izquierda a derecha o viceversa, o bien se abren hacia los lados desde el centro. Es la solución más cómoda y visualmente limpia si contamos con grandes ventanales o puertas de cristal que nos obligan a matizar la luz natural según el momento del día o la estación del año.
Actualmente se fabrican estores en numerosos materiales: Los más habituales se hacen en tejidos naturales como algodón, lienzo o lino, pero si no queremos lavarlos a menudo podemos elegir la tela con un acabado vinílico o de poliuretano que evita el polvo y la humedad. La tendencia llamada «nuevo rústico» ha potenciado el uso de paneles en bambú o madera (como el de la imagen) para aportar a la estancia una atmósfera cálida y de estilo colonial.
En el caso de tener varias ventanas en un dormitorio, no tenemos porqué colocar todos los estores iguales; esta creativa gradación de tonos en rojo sirve para dar un toque de color agradable, haciendo juego con la ropa de cama y el cuadro decorativo del cabecero. Sabiamente se han escogido muebles en blanco y maderas claras para no cargar demasiado las tintas.
Tampoco es necesario renunciar a las clásicas cortinas por el hecho de colocar un estor, como se muestra en este dormitorio: Los tradicionales visillos son sustituidos por un doble estor que se recoge sobre si mismo para graduar la luz en varios niveles, y las cortinas siguen teniendo su función de dar o quitar privacidad.
Pero el visillo no tiene porque ser relegado al olvido definitivamente; un estor tipo «roller» (de los que se enrollan en la parte superior) admite colocar dos tejidos diferentes si montamos dos raíles que giren en posición opuesta, para que la tela traslúcida y la opaca suban o bajen de manera independiente.
Por último, no podemos olvidar los estores de última generación, aquellos que van domotizados o motorizados a través de mando; pueden ser eléctricos, pero también existen modelos que se cargan con batería o con energía solar, una alternativa interesante para utilizar estores en áreas de exterior. Su estilo tiende a ser sobrio y en tonos neutros, pero la mayoría de los fabricantes admiten personalizarlos en caso de proyectos de envergadura.
Más información – Cómo dar un toque de color a la decoración
Fuentes – Design Wagen, Ikrunk, Advance blind, Life Hacker, Cute home design
Me vienen genial estos consejos ahora que estoy a punto de cambiar los de mi dormitorio! Gracias!
Pues si que hay opciones si!