Llega la época de frío, y si existe una sensación estupenda durante el invierno es la de encontrarse calentitos y a gusto en el hogar mientras fuera llueve o nieva. Para incrementar todavía más esta sensación de calidez tenemos un elemento fundamental, la chimenea.
Una chimenea aporta mucha calidez a un espacio, incluso aunque no esté encendida, ya que tiene ese toque romántico y hogareño que le hace falta a muchos hogares. Aunque hubo temporadas en las que han estado obsoletas, hoy en día vuelven a revalorizarse como un detalle de antaño, vintage y que tiene fuerza frente a las formas más modernas de dar calor a la casa, como los radiadores eléctricos.
En esta ocasión vamos a ver unas cuantas ideas que nos inspirarán para tener dormitorios con chimenea. No existe una imagen más romántica que la de un dormitorio con el fuego de la chimenea alumbrando y aportando calor. Además, este elemento puede realizarse en varios estilos, no solamente es apto para los hogares más clásicos, como muchas personas puedan pensar.
Los ambientes de estilo rústico son sin duda los más apropiados para poner este elemento. La madera mezclada con la piedra, que es la forma más rústica de crearla, es una combinación perfecta. Los tonos del dormitorio han de ser cálidos, para combatir la frialdad de la piedra.
Los dormitorios más modernos también tienen la posibilidad de poder añadir una estupenda chimenea. Esta debe realizarse de forma que resulte discreta, con unas líneas rectas y sencillas. Es una idea perfecta, sobre todo si en el dormitorio tenemos líneas rectas o molduras, que casarán a la perfección con los detalles de este elemento. Esto demuestra que hay un tipo de chimenea para cada dormitorio, solamente hay que saber elegirla para que se integre en el ambiente.