Aunque comenzamos el invierno hace poco, ya podemos ir ilusionándonos con la primavera, que está a la vuelta de la esquina, con sus días más largos y luminosos y sus colores claros. Para darle un toque más primaveral y alegre al dormitorio, nada mejor que incluir un toque amarillo en los accesorios, los textiles o las paredes.
Si este es uno de tus colores favoritos, has de saber que también se trata de un tono muy alegre y lleno de vida. Es la elección perfecta para darle iluminación a la habitación, y hay tonos que combinan a la perfección, como el negro, el gris o el azul. Decídete a cambiar unos cuantos detalles del dormitorio que le aporten vida.
El gris es el color perfecto para combinar con el tono amarillo más vivo, e incluso con el tono amarillo mostaza que es más apagado. Se pueden añadir los toques de color amarillo en textiles, como alfombras, mantas o cojines. Lo importante es que este tono es muy intenso, por lo que no se debe añadir en grandes cantidades.
Las paredes también pueden ser un buen lugar para cambiar el estilo de la habitación. Si el espacio es muy grande, es una buena forma de darle alegría al ambiente en tonos blancos. Unos cojines a juego mantienen la armonía en el cuarto.
También podemos tener un dormitorio romántico con estos tonos vivos. Aunque en decoraciones tan románticas se suele utilizar tonos paste suaves, este color también es admisible si viene en pequeños toques. Unos pocos cojines y esos pies de lámparas son más que suficientes para un estilo primaveral pero alegre y más intenso. El blanco suele ser el color predominante en estos ambientes, aunque también se pueden añadir otros tonos como ese azul suave con rosas estampadas.