¿Os gusta la idea de meter un árbol en el salón? La vistosidad de estos, transforma completamente el espacio. Más exuberante, más vistoso y con una nota de color mas; así se verá vuestro salón. Sin embargo, mas allá de ser agradable a la vista, muchas os preguntaréis ¿resulta sencillo mantenerlo con vida? La respuesta no es sencilla y ahí está la clave.
Una cosa está clara, no todos los árboles pueden “plantarse” en el salón. Necesitamos un árbol de pequeño o mediano tamaño, que no requiera exposición directa al sol y cuyo mantenimiento sea mínimo. ¿Existe este árbol? Existe mas de uno, sin embargo, uno de los más utilizados en interiores, como podéis ver en las imágenes, es el Ficus Lira.
Las hojas grandes del Ficus Lira, también conocido como Higuera de hojas de violín, resultan exuberantes y llenan cualquier espacio. Este árbol perennifolio requiere un ambiente luminoso, pero no expuesto directamente al sol, alejado de las fuentes de calor y las frecuentes corrientes de aire ¿Tienes ya el sitio adecuado para el?
Al tratarse de un árbol perennifolio, dará color a nuestro salón durante todo el año. Puede alcanzar los 8 metros de altura, sin embargo es posible controlar la misma. Si dispones de espacios amplios y techos altos, lucirá mucho mejor, pero no son imprescindibles. Al lado del sofá, en un ventanal, o junto a la chimenea ¡búscale un lugar!
Elige macetas acordes a tu decoración para “plantarlo”. En madera o piedra para salones rústicos, con acabados brillantes y en tonos vivos en ambientes minimalistas y modernos… Procura que estas sean del tamaño adecuado para que el árbol pueda crecer y utiliza tierras fértiles y humíferas. Recuerda, deberás regarla cada 4-5 días.
Las plantas dan vida a cualquier espacio. La mayoría de nosotros apreciamos a nivel decorativo el poder de las mismas; pero, ¿conocemos sus beneficios? Limpian el aire, disminuyen el ruido, reducen la electricidad estática y mejoran el ánimo y el bienestar.
Fuente – Gardenista, Infojardin