El papel pintado es una excelente opción para cambiar el aspecto de una estancia, sin tener que gastar demasiado dinero ni hacer obras excesivas. Y es que colocar papel pintado en las paredes ha dejado de ser algo digno de nuestras abuelas, y se ha convertido en una verdadera tendencia en la decoración actual.
La verdad es que se entiende que esté de moda, si se tiene en cuenta todas las ventajas que proporciona usar papel pintado para decorar una casa.
Una de las principales ventajas del papel pintado es la personalidad que otorga al espacio donde se coloca, gracias a sus diseños, muy alejados de la tradicional pintura monocroma.
Además, instalarlo es fácil, lo que hace que lo podamos hacer nosotros mismos, ahorrándonos un buen dinero, algo que se agradece en tiempos de crisis.
Asimismo, hay que recordar que se pueden encontrar infinidad de diseños a la venta, por lo que podremos personalizar al máximo el aspecto de nuestra casa, creando combinaciones y efectos decorativos prácticamente imposibles para la pintura.
Finalmente, no podemos dejar de destacar que el papel pintado es muy útil para tapar imperfecciones de la pared, lo que hará que nuestra casa parezca como nueva sin tener que enyesar y pulir las paredes.
De todos modos, hay que ser realistas, y recordar que el papel pintado tiene un precio bastante más superior que la pintura, con lo que nuestro presupuesto puede verse dañado. Así, pues, es recomendable medir la habitación y pedir un presupuesto.
Fuente: Decorablog
Fuente imagen: Papel pintado, Decoratrix