Aunque son muchas las personas las que sueñan de manera continua con renovar su casa y darle a la misma un aire nuevo y actual, el gran inconveniente de ello suelen ser las temidas obras. Son todo desventajas, desde la suciedad y el polvo que provocan hasta el posible retraso en los plazos de finalización. Sin embargo en los últimos años, se han puesto de moda en el mercado una serie de materiales que pueden ayudar a cambiar la decoración de una determinada estancia sin meterse en las citadas obras. Uno de los materiales que más éxito tiene a día de hoy es el suelo vinílico.
Gracias a este tipo de suelo puedes cambiar por completo el pavimento de una estancia de la casa y dotar a la misma de un aspecto totalmente renovado a la vez que actual. En el siguiente artículo te hablamos de las características y de las bondades de esta clase de suelo.
Cómo se coloca el suelo vinílico
El gran éxito de esta clase de suelo se debe sobre todo la fácil que es colocarlo. No hace falta quitar el suelo anterior y lo puede hacer uno mismo sin la ayuda de profesionales. Este material se caracteriza porque se vende en forma de planchas o de rollos autoadhesivos, recortando con la ayuda de un cúter la superficie que hace falta para cubrir el pavimento en cuestión. No hace falta por lo tanto ningún tipo de obra a la hora de cubrir la superficie de la estancia que se quiera. Hasta hace unos años poner un suelo nuevo requería de un desembolso importante y de una reforma bastante grande.
La limpieza del suelo vinílico
La verdad es que todos son ventajas el suelo vinílico y muy pocas desventajas. A la hora de limpiar este tipo de superficie no hace falta complicarse mucho la vida. Puedes hacerlo con la ayuda de un robot de limpieza o de una manera más tradicional con la ayuda de una fregona. En el caso del método tradicional, basta con pasar una la citada fregona húmeda y limpiar toda la superficie. Aparte de la limpieza hay que indicar que el suelo vinílico es bastante resistente y aguanta bastante bien el paso de los años. En el caso de que observes que dicho suelo se ha ido desgastando con el tiempo, se puede cambiar por otro totalmente nuevo ya que se trata de un material bastante económico para todos los bolsillos.
Tendencia decorativa
Los suelos vinílicos están de moda y son tendencia en lo que se refiere al revestimiento de los suelos de la casa. Puedes optar por colocar en tu hogar un suelo vinílico que sea tendencia y si pasados años ya no está de moda, sustituirlo por otro modelo que sea actual y que sea un auténtica tendencia. Como puedes ver se trata de otra ventaja que hace que el suelo vinílico sea una maravillosa opción a la hora de cambiar el aspecto decorativo de una determinada estancia de la casa.
Imita materiales naturales
Otra de las grandes ventajas de este material es que puedes encontrar en el mercado suelos vinílicos que imiten a materiales naturales como es el caso de la madera o de la piedra. A un precio bastante económico puedes revestir la superficie de una determinada estancia con la imitación que prefieras o quieras. No cabe duda que esta clase de materiales naturales aportan una gran elegancia y belleza al estilo decorativo y lo puedes conseguir gracias al precio módico propio del suelo vinílico.
Dónde comprar un buen suelo vinílico
Los expertos aconsejan que a la hora de hacerse con un determinado suelo vinílico lo mejor es optar por marcas expertas que se dediquen a comercializar esta clase de suelo. Con ello vas a tener la seguridad de que el resultado va a ser el mejor posible. En cuanto a la compra del mismo se puede encontrar multitud de modelos y de diseños en grandes superficies especializadas en el campo de la reforma y del bricolaje.
En relación al precio hay una gran variedad para poder elegir. Si quieres algo barato y económico puedes encontrar suelo vinílico con efecto pizarra por unos 8 euros el metro cuadrado. Si por el contrario quieres algo más de calidad y que imite a materiales naturales como la madera o el mármol, el metro cuadrado puede costarte unos 25 euros más o menos.
En definitiva, no cabe duda de que son todas ventajas en lo que se refiere a un tipo de revestimiento como es el caso del suelo vinílico. Lo mejor de todo es que es muy fácil y sencillo de colocar y que se puede sobreponer sobre el suelo antiguo. Ello hace que no sea necesario el hacer ningún tipo de obra y que no haga falta contratar a profesionales para colocarlo.